
El sello Punto de lectura (del grupo Santillana), que publica en formato bolsillo, re-edita en 2006 la novela La balada de Johnny Sosa de Mario Delgado Aparaín. Es la tercera reedición desde su publicación original en Banda Oriental en 1987. Por lo tanto se refuerza el prestigio acumulado por la novela y su autor. Fue publicada en un período de enorme complejidad y debate tras dos años de restauración de la democracia. Después de casi veinte años la pregunta es cómo será leída en el panorama actual de la narrativa uruguaya, cuando Mario Delgado Aparaín se ha convertido en una de las figuras representativas de la literatura uruguaya en el mundo, con obras traducidas al portugués, inglés, francés, alemán o griego; y después de haber publicado Alivio de luto (1998), de No robarás las botas de los muertos (2002) e incluso de Tabaré revelado (2005).
En 1980 aparece Crónica del descubrimiento de Alejandro Paternain. Era el diario del descubrimiento de Europa escrito por un cronista de la tribu de los mitones de Tebiché, una contra-crónica del descubrimiento de América, un texto escrito a contracorriente de los textos imperiales de un Cristóbal Colón, un Hernán Cortés y otros tantos conquistadores. Es también precursor de novelas como ¡Bernabé, Bernabé! (1988) de Tomás de Mattos y formará parte del auge de la novela histórica en la posdictadura. En este marco La balada… fue leída como una parodia de la dictadura civico-militar.
Pero hay más. Una parte importante de la producción narrativa de Mario Delgado Aparaín está ambientada en dos ciudades imaginarias: San José de las Cañas y Mosquitos, metáforas de diferentes ciudades del norte y el sur del país. En estos cuentos y novelas Delgado dialoga con una tradición de narradores “del interior” que fue dominante en la primera mitad del siglo XX. La apropiación de esta tradición es selectiva y también paródica, como en el caso de La balada… que mantiene algunos escenarios como la periferia de la ciudad o el prostíbulo, introduciendo un héroe que se identifica con el blues y el rock and roll a través de la radio local. Una variante temática impensable en esa tradición; tan impensable como la opción por el lenguaje cotidiano y popular con el que narra esta historia.
El héroe de esta novela es un negro, pobre y sin dientes, que canta en inglés sin entender más que unas pocas palabras. Su escenario es una tarima en el prostíbulo de la ciudad de Mosquitos. Johnny es un voyeur. Todos los días a la misma hora, mientras espera que comience su programa radial favorito, observa el movimiento de Mosquitos a través de un agujero en la pared. Programa a programa el conductor Melías Churi relata la biografía de Lou Brakley, un rocker estadounidense de Austin, con la que Johnny intenta establecer analogías a veces poco felices con su vida y Mosquitos. Johnny percibe que algo anda mal con la llegada de los camiones del ejército y la sustitución del programa de Churi por unas marchas militares.
En poco tiempo un Coronel golpista se instala en el pueblo. Confabulado con un cura, un maestro de música y un doctor organiza una chorizada cultural en la que obliga a Johnny a cambiar el prostíbulo y el rock “en inglés” por una dentadura postiza y el bolero en español. Johnny acepta primero pero se resiste después al chantaje. Vuelve a cantar en el prostíbulo y ante la presencia de dos testaferros del Coronel que intentan llevárselo con ellos. Johnny escapará por la ventana del baño como un esclavo cimarrón consciente de que aunque no pudiera festejarlo y por una única noche “los había jodido, bien, pero bien jodido.”
Esta es una de las pocas historias épicas de la literatura uruguaya, o más bien una anti-épica, en la que el héroe es un negro. Y se publicó antes del Uruguay de la cuota, de la ley del día del candombe y la equidad racial y la entrada de los toques de Barrios Sur, Palermo y Cordón Norte a la lista representativa de patrimonio inmaterial de la UNESCO.
Este texto fue publicado con el título “Anti-épica revisitada. Reedición de novela de Delgado Aparaín” en la diaria Nº 20. Montevideo, 17/04/06: 6.