El grupo de investigación Historia de la traducción literaria en Uruguay, está integrado por las docentes e investigadoras universitarias Lucía Campanella, Leticia Hornos, Rosario Lázaro Igoa y Cecilia Torres (pueden consultar sus perfiles aquí). El grupo tiene como objetivo central indagar en la traducción literaria en Uruguay, desde comienzos del siglo XIX hasta hoy, con una perspectiva interdisciplinaria y como aporte a la “historia intelectual y editorial del país y sus relaciones con la región y el mundo”. Para ello se proponen visibilizar las prácticas de traducción locales en relación a la tradición literaria nacional, con una mirada también social e histórica. Se trata de una búsqueda original que aporta y aportará mucho a la discusión sobre la literatura, los diálogos interculturales y las prácticas editoriales en nuestro país.

En 2021 el grupo preparó un ciclo de conferencias bajo el título: Metodologías de investigación en Estudios de Traducción e Interpretación, organizado por el grupo, con el apoyo del Centro de Lenguas Extranjeras de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (UdelaR, Uruguay) y el Posgrado en Estudios de Traducción (Universidad Federal de Santa Catarina, Brasil). En instancias separadas, entre agosto y noviembre de este año, el ciclo contó con la participación de Marlova Aseff (Universidade de Brasília, Brasil), Sandra Hale (University of New South Wales, Australia), Nayelli Castro Ramírez (University of Massachusetts, EEUU), Nayelli Castro Ramírez (University of Massachusetts, EEUU) y Anthony Pym (University of Melbourne, Australia). Apoyaron la organización de las conferencias: Jeane Carla Barbosa (Doctoranda PGET, UFSC, Brasil), Penélope Serafina Chaves Bruera (Becaria CAPES de Maestría PGET, UFSC, Brasil) y Wharlley dos Santos (Becario CAPES; Profesor Sustituto UFES, Brasil). El evento cierra este jueves 25 de noviembre con la participación de Gabriela Villalba (Instituto de Enseñanza Superior en Lenguas Vivas, Argentina). Todas las presentaciones están disponibles en la web del grupo y para presenciar la última reunión deben inscribirse previamente.

Hace unas semanas me contacté con el grupo de investigadoras y proponer un diálogo sobre su trabajo y sobre su perspectiva en torno a las políticas editoriales y la traducción literaria en Uruguay. Lo que sigue son sus repuestas, que contestaron como grupo.

¿Cómo surge la idea del grupo de investigación y cuáles son sus objetivos?

El grupo surge a partir del interés compartido por la traducción literaria en su vínculo con el campo cultural uruguayo, porque tenemos una serie de afinidades y simpatías personales y todas estamos de una manera u otra trabajando en la Udelar. También hay coincidencias en relación a las formas de trabajo que preferimos, colectivas y de intercambio, que nos vienen enriqueciendo a todas. Observamos, luego de conocernos en distintos ámbitos académicos, que se venía desarrollando a partir de esfuerzos individuales una serie de propuestas de abordaje de estudios de traducción centradas en la realidad uruguaya. Visto que teníamos un interés en común (aunque nuestra formación fuera diferente y nos ocupemos de diversos aspectos del mismo tema, con diversos encuadres teóricos), decidimos comenzar a trabajar como grupo y consolidar nuestra investigación. Algunos relevamientos preliminares sobre traducciones literarias en el Uruguay nos muestran que, lejos de lo que comúnmente se asume, en nuestro país se tradujo y se traduce. Lo que nos convoca es estudiar qué, cómo, cuándo, dónde, por qué motivos (etc.) se lleva y se llevó adelante esta práctica. Un relevamiento de estas características no ha sido realizado hasta la fecha y puede servir de base para mostrar aspectos hasta ahora relegados de nuestra historia cultural.

Uno de nuestros objetivos es fortalecer el campo de estudio, esto se vincula estrechamente con la necesidad de realizar un relevamiento de las traducciones literarias en Uruguay y hacer una base de datos. Eso como primer paso. De esta forma, queremos visibilizar el rol y el valor del traductor (literario, en este caso) y analizar sus prácticas, así como las prácticas de traducción específicas que se llevan a cabo acá. Este análisis, entre otras cosas, nos puede decir mucho sobre flujos de traducción, repercusión de la literatura traducida sobre la vernácula y, no menos importante, entender nuestra propia percepción de la literatura y de la lengua como comunidad. A su vez, repercute en cómo pensamos las prácticas letradas en general que se dieron en este territorio, la historia del libro y la edición en nuestro país, y la dinámica de los intercambios y las relaciones con otras lenguas y regiones.

Desde agosto vienen realizando un ciclo de charlas con distintos profesionales. El ciclo se propone como un espacio para reflexionar sobre las metodologías de investigación en estudios de traducción e interpretación. Aunque el ciclo todavía no terminó, ¿qué evaluación hacen de los eventos y el debate?

El ciclo de charlas fue organizado en conjunto por el CELEX (FHCE, Udelar) y el Posgrado en Estudios de Traducción, de la Universidad Federal de Santa Catarina (Brasil). Invitamos a investigadores que llevan adelante proyectos muy relevantes en diferentes ámbitos y países, como Argentina, Brasil, México y Australia. La idea es mostrar la cocina por detrás de los proyectos, que es algo en general que no se tematiza lo suficiente. La evaluación hasta ahora es muy positiva. Contamos con expositores de primera y las presentadoras han hecho una muy buena tarea, introduciendo las preguntas del público y las propias. Hemos generado un espacio de intercambio abierto y plurilingüe (las preguntas se hacen y se responden en distintos idiomas dependiendo del expositor y del público). Que haya funcionado tan bien da cuenta del interés por las cuestiones metodológicas y de lo fructífero que está siendo el campo de la traducción a nivel internacional.

¿Cómo llegan a interesarse por la traducción literaria?

Lucía viene de la literatura comparada. Sus estudios de grado y su doctorado estuvieron centrados en temas literarios sin especial desarrollo de los estudios de traducción, por lo que está desde hace varios años leyendo, participando en seminarios y coloquios, e interesándose especialmente sobre las herramientas para el relevamiento digital de traducciones en prensa, así como por los archivos de traductores y la relación política – traducción literaria, campos poco desarrollados aquí. Leticia se concentra en el estudio de la figura y el papel de los agentes que, por vía de la traducción, intervienen en los procesos de circulación de la literatura traducida en el sistema literario uruguayo. En sintonía con la línea de investigación de su maestría (sobre las traducciones de Kafka de escritores uruguayos como Héctor Galmés y Mario Benedetti) su investigación doctoral indaga las traducciones inéditas de Mercedes Rein y hace foco en la función de los archivos de traductores en la dinámica cultural uruguaya. En 2006, Rosario hizo un posgrado en traducción literaria en la UdelaR y desde entonces enfocó su investigación en el área. Obtuvo la maestría y el doctorado en Estudios de Traducción en la UFSC, Brasil. Investiga y publica sobre literatura traducida, flujos de traducción en la literatura iberoamericana, antologías en traducción y traducción periodística. Ha traducido varias obras literarias del inglés y del portugués al español. En el caso de Cecilia, en el marco de su tesis de maestría, descubrió que la novela que estaba analizando formaba parte de una colección —Agapá, de Trilce— de más de sesenta obras traducidas del francés. Se abrió, así, un campo de estudio sumamente interesante, que hasta la fecha permanece poco explorado, salvo por los aportes específicos de, entre otros, las compañeras que conforman este grupo de investigación. En este momento mantenemos un blog donde vamos publicando las diferentes actividades del grupo y donde están disponibles las charlas del ciclo realizadas hasta ahora: https://traduccionliterariaedu.wordpress.com/

¿Cómo ven la relación entre traducción literaria y editoriales en Uruguay?

Para entender cabalmente el fenómeno, conviene separar las traducciones que llegan a través de los grandes grupos editoriales al país de las traducciones que se realizan en el marco de las editoriales independientes locales. A diferencia de lo que ocurre en Argentina, estas últimas conforman su catálogo principalmente a través de la publicación de autores locales: no existe una tendencia marcada a nutrirse de obras traducidas con apoyos de programas culturales de gobiernos extranjeros. No obstante, casos como el de la colección Agapá, en Trilce, o traducciones como las publicadas en Alter, nos muestran que igualmente las editoriales independientes traducen. El informe del CERLALC de 2020 sobre la internacionalización editorial en América Latina muestra que, según datos de ISBN de 2018, Uruguay es el segundo país hispanohablante, luego de España, en publicaciones de novedades editoriales por cantidad de habitantes. Este dato muestra que, para la población del país, se publica y mucho. Podríamos calificarlo como un mercado editorial muy activo. Ahora bien, ¿es posible que las obras traducidas por las editoriales uruguayas queden escondidas en esta marea de publicaciones?

Por lo tanto, podemos decir que se traduce, pero en una proporción notoriamente menor en comparación al caudal de libros originalmente en español publicados por las editoriales uruguayas. Esto es interesante para plantear nuevas preguntas: ¿qué lugar ocupa la traducción en la forma en que concebimos la literatura hoy comparado, por ejemplo, al lugar que tuvo cincuenta años atrás? ¿Se traduce menos que antes? ¿Qué vínculos tienen nuestros intelectuales con otras literaturas y de qué manera se establecen estas relaciones?

En principio, podríamos afirmar que la traducción de obras literarias por parte de las editoriales independientes uruguayas cumple con el objetivo de acercar al lector obras en español que, de otro modo, no serían de su conocimiento. Más que nada, porque no se trata de obras que puedan ser de interés, en primera instancia, por parte de los grandes grupos editoriales que operan en el país. Entonces, lo que se puede observar, al menos de un tiempo a esta parte, es que hay una fuerte asociación entre lo que se traduce al español en Uruguay y las editoriales independientes.

No menos importante es el papel que cumplieron y cumplen ciertos traductores o editores, como figuras aisladas la mayoría de las veces, en introducir cierto tipo de obras en el sistema editorial uruguayo vía traducción. En ese sentido, hacer una historia de la traducción literaria en el Uruguay es un enorme desafío, pero es también una necesidad, que como grupo nos proponemos abordar.


La imagen de portada es un fragmento de «La torre de Babel (Vienna)» de Pieter Bruegel the Elder. Fuente: Wikimedia Commons.